El patio trasero de una casa es ideal para el esparcimiento y el compartir de todos los miembros de la familia. Por eso, darle vida y funcionalismo es imprescindible para recuperar un espacio muchas veces olvidado.
En esta ocasión presentamos uno de los proyectos más interesantes de BERVIC INTERIORISMO, presentan esta maravillosa transformación de estilo mediterráneo, caracterizado por sus blancos tablones de madera que revisten la piscina y el resto del lugar, creando un ambiente totalmente diferente y fresco en diseño y estructura, transportándonos a un lugar paradisiaco y relajante.
Echémosle un vistazo a esta gran remodelación:
Los elementos apilados como: Plantas, parrillera, manguera y piscina sin armar… Hasta un pequeño tobogán rosa, representan la necesidad de un cambio. Los colores –algo desvanecidos por el tiempo- de las paredes y piso, promueven el desgaste y sin sabor de este espacio.
En este proyecto Terraza Saint Antoni De Calonge se observa la inspiración en lo mediterráneo. Las tablas de madera revistieron todo el piso al igual que la piscina y se recreó una terraza muy europea y elegante.
Cuando tenemos un espacio es importante darle un sentido, un propósito. De lo contrario ocurrirá algo similar a esto. Los lugares que no cumplen una función para el habitante, termina considerándose como el cuarto de cachivaches.
Si bien las terrazas son un lugar ideal para tomar el sol y descansar, en este espacio no existía la oportunidad de protegerse del mismo. Aunque la sombrilla permanece cerrada, el lugar donde está ubicada no ofrece comodidad ni practicidad. En relación a las barandas estas permanecían en un solo lado del muro, no enmarcaba el resto de la estructura.
En este proyecto se buscó rescatar el espacio y aprovechar cada una de sus bondades con estilo y un toque de lujo mediterráneo. Como podemos apreciar, el piso se transformó completamente brindándole a su vez un nuevo renacer a la piscina. Se ubicaron paneles de madera de color blanco, unificando todo el complejo ofreciendo otra visión más delicada y suave.
La naturaleza se reintegra con árboles y plantas—es mejor tenerlas verde que te quiero verde, brillantes y sanas que marchitas- con sus bases en madera se unifican con el piso, al igual que la nueva mesa de centro con sus sillas y muebles al costado.
Al fondo, observamos las tumbonas de color blanco desplegadas, incitando al descanso y disfrute en el lugar.
La clave de este proyecto fue aprovechar cada centímetro del lugar y convertirlo en un espacio de lujo y a la vez, simple y minimalista. El armario complementa el resto de la obra y además, ofrece practicidad a los usuarios.
Como estructura la pérgola ofrece la sombra que antes no existía y que bastante que hace falta, sobre todo en espacios abiertos como éste. Sus vigas y columnas, enmarca el área de la mesa, ideal para conversar a gusto y divertirse bajo el sol.
La lona en color beige ofrece sombra y estilismo con su aspecto voladizo, como si el aire le sedujera sutilmente. Por su parte, la lámpara en mimbre le da equilibrio y un centro focal al entorno.