¿Estás pensando en decorar la casa? ¡Evita estos 7 errores fatales!

Rocío E Rocío E
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Por mucho que lo deseemos y aún haciendo nuestro mejor esfuerzo, rara vez una casa decorada por nosotros queda como la de las revistas. Lo peor es que ¡no nos damos cuenta qué estamos haciendo mal! Eso desespera. Sobre todo porque seguimos la pie de la letra lo último en tendencias decorativas: los colores de moda, los muebles de moda, los objetos decorativos de moda… pero, no hay caso.

La pregunta que hacemos desde acá es: ¿por qué no seguís tu corazón, tu deseo, a la hora de decorar? Lamentablemente, ningún manual te dirá cómo tenés que decorar tu casa, tu morada, ese lugar que habitás vos y sólo vos. Lo que sí existe es una recopilación de errores frecuentes en decoración de interiores: quizás te identifiques con alguno. En todo caso, en este libro de ideas te decimos clarito clarito qué cosas no tenés que hacer si vas a decorar tu casa. ¡Pasemos a ver y leer!

​Los muebles en el lugar equivocado

El problema: se han puesto los muebles contra las paredes y ahora se enfrentan a un espacio en blanco en el medio de la habitación. Si es tu caso, sentirás que desperdiciás lugar y que el espacio se achica.

La solución: cambiar los muebles de lugar, ponerlos lejos de las paredes y armar un grupo en el centro de la habitación. Verás que habrá mucho más espacio. Por otra parte, si preferís tener un espacio abierto, la situación mejorará sensiblemente dejando unos centímetros entre la pared y los muebles. Vas a ver que parece que las paredes están más lejos. 

En la imagen de arriba, un living soñado, obra de Hall + Bednarczyk Achitects.

El exceso de color en las habitaciones

El problema: decoraste la habitación entera en una adecuación de colores, tejidos y patrones tan exhaustiva que parece que todo se funde, perdiendo perspectiva y, por tanto, profundidad. Este problema redunda, entonces, en que la habitación parezca más pequeña.

La solución: variar los colores, las telas, texturas y estilos para las almohadas, mantas, alfombras, tapicería, cortinas y todo lo que sean textiles. Por otra parte, siempre conviene pintar de un tono vibrante sólo una pared, dejando las otras en neutro. Los contrastes amplían, mientras la inclusión de colores idénticos tiende a achatar. 

Un dormitorio profundo tenemos arriba, obra de Moda Interiors.

Revestimientos y empapelados oscuros

El problema: el empapelado de la habitación posee colores demasiado oscuros. Los tonos oscuros tienden a achicar, por lo que hay que cuidar qué muebles colocás delante de las paredes.

La solución es sencilla, consiste en utilizar tonos más claros para muebles y accesorios. Así, tendrás una sensación de espacio abierto, ventilado y mucho más atractivo. Por otra parte, las paredes oscuras sólo convienen en ciertos lugares de la casa, como detalle en un sector de una habitación, jamás en la habitación completa.

Increíble, por su parte, la pared de Textura Wallcoverings.

Accesorios por todas partes

El problema: no hay caso, decoraste y quisiste ocupar cada rincón disponible en la habitación con accesorios, recuerdos y otros artefactos preciados. Amás cada cosita pero notás un conjunto desordenado y no tenés idea de qué hacer.

La solución: poner todo junto en un armario y crear colecciones de temporada de tus artículos preferidos. Cambiarlos regularmente en vez de poner todo junto. Otro consejo verdaderamente útil es hacer tripas corazón, empacar tus cosas favoritas, y llevarlas a alguna compra-venta o, por qué no, regalarlas. Las cosas son cosas y si se estancan en un sitio nos estancamos nosotros con ellas. ¡A fluir!

Pensá en tener un ambiente armonioso como el de Studio Duggan depende de vos.

El largo de las cortinas genera dilemas

El problema: si las cortinas son demasiado cortas es probable que el techo parezca más bajo. Se trata de un efecto óptico tan sutil como contundente. Si sentís que algo falla y no sabés qué es, probablemente sea el largo del cortinado.

La solución: siempre que las cortinas caen hasta el piso, la habitación parece mucho más grande. De todos modos, si el techo de tu casa está bajo, podés poner el barral de la cortina lo más cerca posible del techo. El impacto ante una cortina enorme provoca la sensación de que el techo se eleva.

Exceso de muebles

El problema: tenés demasiados muebles. No sabés cómo, no sabés por qué, pero un buen día tu comedor quedó intransitable por tantos muebles y no se te ocurre cómo ponerlos para que haya más lugar.

La solución: vas a tener que desplazar el exceso de muebles a otras habitaciones de la casa. Por ejemplo, usá la silla mas cómoda en tu dormitorio, como sitio para leer un poco y descansar. Por otra parte, un consejo valioso es no colocar muebles frente a las ventanas. Se gana una gran sensación de amplitud cuando al elevar la vista hacia afuera nos encontramos con el camino despejado.

Iluminación escasa

El problema: hay una sola lámpara en la habitación. La poca luz hace que el espacio se reduzca, generando sensación de encierro, pequeñez, opresión. Se trata del famoso efecto cueva.

La solución: aumentar el número de lámparas. Sobre todo si no tenés luz natural, elegí tres lámparas y esparcilas por toda la habitación. La luz adicional se reflejará en las paredes iluminando los rincones oscuros. ¡Las luces indirectas crean atmósferas súper interesantes!

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