La nueva sede de Google en California

Marisa Alcore Marisa Alcore
Google's new Californian HQ - Mountain View - Heatherwick + Bjarke Ingels Group, Heatherwick Heatherwick
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Tras haberse instalado en diferentes ciudades del mundo de maneras muy diversas, desde en una casa de campo en Dinamarca hasta en una manzana en Nueva York, Google nos vuelve a sorprender con un nuevo proyecto para la sede de sus oficinas en California. La propuesta entregada al ayuntamiento ha sido realizada por los arquitectos Bjarke Ingels y Thomas Heatherwick, y es uno de los diseños más ambiciosos e impresionantes con los que cuenta este gigante de Internet. Viendo sus imágenes es posible entender el gran revuelo que ha causado: la flexibilidad de sus planos y sus formas orgánicas no solo acogen un nuevo hogar para los trabajadores de la compañía más innovadora del mundo, sino una gran comunidad que mejora el hábitat natural local. 

A pesar de haberse embarcado en los proyectos de arquitectura comercial más ambiciosos de los últimos años, Google sigue apostando por la originalidad y la diferencia, quizá por eso es una de las empresas más importantes a nivel mundial. 

Arquitectura y naturaleza

El proyecto tiene como fin acercar la arquitectura a la naturaleza para dar forma a un espacio dinámico en constante contacto con el paisaje. De esta manera, las oficinas y espacios interiores se entremezclan con zonas verdes, que mejoran sus cualidades y condiciones. El diseño es indiscutiblemente exclusivo e invita a trabajadores y curiosos a disfrutar de sus instalaciones y vistas. 

Silicon Valley

Aunque Silicon Valley ya cuenta con una sede de Google entre sus muchos edificios, esta propuesta busca aumentar significativamente su presencia, y consecuentemente sus metros cuadrados, en el considerado paraíso de la tecnología. El emplazamiento de este nuevo edificio en Mountain View, fue eligido hace 15 años por la singular belleza de su bahía, su estratégica proximidad a universidades de renombre y su espíritu medioambiental. Google quiere devolver a esta comunidad, el gran apoyo que recibió de ellos desde sus orígenes. 

Sensibilidad medioambiental

En vez de apostar por una arquitectura rígida y másica, este proyecto arriesga con la construcción de estructuras adaptables y ligeras que pueden desplazarse con facilidad. Se juega con el espacio, envuelto por una superficie de vidrio a modo de marquesina que controla el clima, permitiendo la entrada de luz natural y aire fresco, y al mismo tiempo protegiendo a las estancias interiores de las inclemencias. 

Borrando límites

Estas cubiertas transparentes a modo de toldo, se encuentran en distintos puntos y encierran zonas verdes consiguiendo crear parques que difuminan las fronteras entre exterior e interior. Interior se fluye con exterior a través de interesantes paseos y carriles bici que permiten habitar el espacio verde que forma parte de este proyecto.

Medio ambiente

Si tenemos alguna duda del respeto hacia el medio ambiente de este nuevo proyecto, es importante remarcar que otro de los objetivos primordiales de Google y del proyecto, era proteger y fomentar la fauna local, construyendo de la manera más ecológica y sostenible esta nueva sede. 

El ahorro de energía también forma parte de las cualidades de esta gran construcción verde, que cumple el reciente acuerdo de Google: compensar el consumo de energía en North Bayshore. 

La comunidad

Google no solo tenía la intención de implantar su nueva sede en este lugar, sino mejorar la calidad de sus alrededores, mediante la implantación de diferentes servicios como nuevas infraestructuras, restaurantes y comercios que crearán además un gran número de puestos de trabajo. No se trataba de imponerse, sino integrarse, creando una comunidad y no una fortaleza. 

Un barrio urbano

La idea de comunidad frente a fortaleza tiene más significados. El área proyectada no solo está enfocada en acoger a los empleados de la empresa, sino a cualquier vecino o visitante que quiera descubrir y disfrutar de estos paisajes y áreas. El objetivo es, que cualquier persona pueda sentirte parte de este barrio de nueva creación. 

Los autores

No hay que quitarle mérito a los responsables que se encuentran detrás de este proyecto. Esta sede de Google es el resultado de una colaboración entre el destacado arquitecto de origen británico y fundador del estudio Heatherwick, Thomas Heatherwick, y el renombrado arquitecto danés Bjarke Ingels, fundador de BIG. 

La arquitectura de BIG surge de un cuidadoso análisis de cómo la vida contemporánea evoluciona y cambia constantemente, y precisamente por este motivo, Ingels fue seleccionado por Google para que participara en el diseño de su comunidad acompañado por Heatherwick, atento a la belleza y a la escala como demuestra su amplia obra. 

Esta asociación de mentes e ideas ha dado lugar a un diseño creativo y único de perspectiva plural. 

Un entorno estimulante

La creatividad engendra creatividad y ese ha sido uno de los enfoques que ha tenido el diseño de este edificio. Los espacios de trabajo de Google son conocidos, no solo por potenciar la productividad de sus trabajadores, sino también por satisfacer otras necesidades, como el descanso y la relajación: ambientes cómodos que estimulan. 

Terminamos aquí el recorrido por este proyecto, no sin antes invitaros a que visitéis:

La arquitectura de Bjarke Ingels Group

El nuevo aeropuerto de Zaha Hadid en Pekín

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