Estilos y diseños de fregaderos

Karen Ayerve Karen Ayerve
Dogma 100, Dilber & Stolfi architetti Dilber & Stolfi architetti Kitchen
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Uno de los elementos más importantes dentro de la decoración de una cocina, además de la encimera, son los fregaderos. A pesar de estar muy a la vista, muchas veces no les damos el protagonismo que merecen y tendemos a tomarnos a la ligera la decisión de su diseño y tamaño. El lugar por donde todos los alimentos han de pasar antes de entrar en los fogones merece que le dediquemos un poco más de atención para convertirlo en una pequeña gran pieza de diseño.

Aunque los más tradicionales utilizan el acero inoxidable como material, dentro del mercado existen unas cuantas alternativas para que podemos elegir la que más se adapte a las cualidades de nuestra cocina, mármol o acrílico son algunas de ellas. ¿Y qué decir de los diseños? De encastre, eléctricos, o sobre encimera. Todo es cuestión de saber elegir. A continuación, os dejamos las propuestas que desde homify hemos seleccionado.

Funcionalidad total

La regla de oro en la decoración de interiores dicta que un elemento, además de encajar con el diseño que se ha elegido para la habitación, debe ser, ante todo, funcional. La última inspiración que os proponemos, no sólo respeta estas dos reglas, sino que además le suma un valor añadido, el material del que está hecho: una mezcla entre minerales y acrílicos resistente a impactos, manchas y a temperaturas bastante elevadas, que presenta una textura de formas limpias por lo que el resultado cuenta con ausencia de grano. Su diseño en monobloque, le da al fregadero, y a la encimera en sí, un aspecto compacto. No podemos acabar este post sin antes mencionar la cubierta deslizable y de quita y pon que aparece en la esquina derecha de la imagen y que nos permite organizar el espacio. Muy práctico, ¿verdad?

Como habrás podido darte cuenta, hablar de fregaderos, es hablar también de encimeras. Dos piezas inseparables donde la elección del primero depende de la segunda, y viceversa. Aquí podrás encontrar muchas más inspiraciones sobre ambos y elegir la combinación perfecta.

De par en par

Contar con fregaderos de doble cubeta puede ser de lo más práctico cuando los quehaceres de la cocina se vuelven algo tediosos y abundantes. Primero, sus dos bandejas y doble grifería, son toda una declaración de su enorme funcionalidad. Este diseño nos permite repartir el uso que a cada una queramos darle, por ejemplo, mientras en una lavamos la fruta, en la otra fregamos los platos. El de la fotografía, de acero inoxidable y acabado en brillo, combina de manera estilosa las formas redondas y cuadradas en su diseño. Además se convierte en nuestro mejor aliado para mantener un cierto orden entre lo que entra y sale de un fregadero.

De negro elegante…

Las encimeras de color negro exigen un fregadero acorde a esos aires de elegancia y distinción que presentan. Y no existe mejor opción, que los tradicionales de acero inoxidable. En esta ocasión, se ha colocado el fregadero sobre la encimera para optimar al máximo el espacio disponible, lo mismo que persigue su diseño de única cubeta rectangular. Tanto si la cocina donde piensas instalarlo es de grandes dimensiones o más pequeña, lo mejor es optar por este tipo de diseños, sencillos, ¡pero funcionales!

… o de blanco impoluto

La casa italiana Effegieffe S. N. C.  ha diseñado a base de mármol blanco este fregadero de cubeta con escurridor incluido que ha sabido encajar de manera inteligente dentro una encimera de silestone del mismo color. Los fregaderos de diseños rectos, como el de la fotografía, funcionan cuando se instalan cerca de esquinas o al borde de la encimera, ya que permiten aprovechar las zonas muertas de los rincones. Este es, además, un buen ejemplo de los efectos estéticos que se pueden conseguir en una cocina al combinar el mismo color en encimera y fregadero de encastre.

Mimetizándose con el espacio

Otra tendencia a la que se recurre bastante a menudo es la de igualar el color de la encimera con la cubeta del fregadero o incluso la de convertirse en una extensión más de la misma. Eso precisamente lo que nuestra siguiente inspiración ha conseguido: crear la zona del cesto escurridor, con antideslizante decorativo incluido, a partir del mármol de la encimera, añadiendo una ligera variación en la tonalidad del color. Su cubeta única está fabricada con sintético para distinguirla del resto del fregadero. Como vemos, una vez más, se ha preferido colocar el fregadero cerca de las esquinas.

Fuera de lo común

Los fregaderos como pieza independiente de la encimera, se han ido ganando por mérito propio, un importante espacio dentro de las tendencia en los sumideros. ¿La razón principal? Al quedar gran parte de su apariencia al descubierto, contribuyen en gran medida a dar un toque original y personal a la cocina. El de la fotografía, de granito, y de un tamaño considerable, para compensar su diseño de cubeta única ha sabido encajar a la perfección su diseño con el pequeño armario que se ha colocado en el espacio inferior. De esta forma se mantiene siempre a mano, entre otros, los materiales de limpieza. 

De dos compartimentos

Una vez más se ha optado por incorporar el material de la propia encimera en el diseño del fregadero. En este caso, lo hace a través de unas discretas ranuras de drenaje integradas por las que ha de escurrirse el agua de los alimentos o vajillas. Su doble cubeta, una más grande que la otra, actúan como compartimentos en los que organizar lo que sea que ocupe en ese momento nuestras manos. Una gran otra opción si lo que se busca es optimizar espacios y tiempo. Otro detalle al que apuntar es esa combinación perfecta de un fregadero en tonos blancos dentro de una encimera de madera. 

Una combinación de lujo

Aunque el material más común que se utiliza en la fabricación de fregaderos es el acero inoxidable, existen otros como el mármol, igual de cómodo y funcional que los primeros. El acabado apomazado que suelen presentar les otorga una apariencia un tanto tradicional y campestre por lo que casan muy bien dentro de cocinas de decoración rústica. Ahora bien, si aún no lo tienes claro, y cuentas con dos tipos de encimeras, como es el caso de la fotografía, siempre puedes instalar ambos estilos de fregaderos, acompañados de una estilosa grifería que acabe por poner la guinda al diseño de uno y otro.

De monobloque

Nuestra siguiente inspiración está fabricada a base de Lapitec, un material similar a la piedra, y que reúne en uno todas las ventajas del granito, el cuarzo y la porcelana. Esto lo convierte en el material estrella para la fabricación de encimeras de cocina, y de cualquier otro mueble expuesto a cambios bruscos de temperatura. Pues bien, qué mejor material, que el Lapitec, para incorporarlo además al diseño de fregaderos. El de la fotografía, presenta un diseño de monobloque al formar una sola pieza con la encimera, y está además integrado al ras para evitar formar juntas en las que pueda ocultarse cualquier tipo de suciedad. Y es que en la cocina, más que en cualquier otro rincón de casa, ¡la higiene es primordial!

Pura innovación

Lejos de querer convertir el fregadero en una pieza que luzca al ton y son de la encimera, existen nuevos diseños, como el de la fotografía, que lo convierten en todo un elemento con estilo y personalidad propia. Se trata de un fregadero eléctrico, de sobre encimera, en el que podemos controlar, por una parte, la fuerza con la que cae el agua y por otra, la temperatura de la misma, a través de un mando a distancia, o de forma manual presionando los botones incorporados dentro del fregadero. Cuenta además con dos tapas para cubrir uno de los dos lavabos, o ambos a la vez. Un diseño innovador que no puede faltar en cualquier cocina moderna.

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